miércoles, 5 de octubre de 2016

Reseña: Deseo, historia y cultura

Deseo, historia y cultura

Autor: Daniel Gerber
Primera edición: 2016
ISBN: 978-607-9497-04-0
Páginas: 400
Ediciones Navarra
México, Ciudad de México






Ante la historia, entonces, el psicoanálisis convoca a enfrentarse a lo traumático, lo silenciado, lo que de un modo u otro se ha intentado borrar de los archivos. Enfrentarlo para incluirlo en la memoria, es decir, con la finalidad de construir la memoria que hace falta para abrir la posibilidad de una nueva historia. Sólo así será posible «transformar la pesadilla en visión, liberarnos así sea por un instante, de la realidad disforme por medio de la creación».  
Daniel Gerber

Daniel Gerber Weissenberg, psicoanalista de larga trayectoria en el campo clínico, escritural y de la transmisión de psicoanálisis en el país (México), es uno de los analistas que crean su vigencia desde distintas aristas; si bien, el analista en su función posibilita la apertura a la creación de un sentido nuevo en la particularidad de un sujeto, pero también, aquel que se inmiscuye en la escritura nos acerca los elementos para repensar nuestro quehacer, y esto no solo aplica para los analistas, dado que como sujetos de lenguaje, somos el urdimbre por el cual se sostiene el lazo social.
    Autor de diversos artículos y de los libros El psicoanálisis en el malestar en la cultura, Ed. Lazos 2005; Discurso y Verdad, Escuela Libre de Psicología de Puebla, 2007 y De la erótica a la clínica, el sujeto en entredicho, Ed. Lazos, 2008; ahora presenta Deseo historia y cultura, Ed. Navarra, 2016, libro que continúa con esa calidez, armonía y claridad para desarrollar conceptos y construir esos puentes temáticos que lo caracterizan, mismos que invitan a releer las obras de Freud, los seminarios de Lacan, retomar los textos literarios, regresar a los apuntes, a las notas, o adentrarnos al mundo del cine para dar cuenta de lo que se entreteje en su nuevo libro. Freud echó mano de la literatura, de las ciencias de la época y de la filosofía para dar fe de sus resultados y descubrimientos. Gerber, funde diversos elementos para presentar una lectura profunda, documentada y siempre con el soporte de la experiencia clínica.
    El libro nos presenta parte de su archivo, del cual se ha apoyado en distintos momentos de su trayectoria; sea en ponencias, colaboraciones para libros, revistas virtuales o comentarios, y nos comparte material inédito, mismo que atraviesa los ejes que lo titulan. La claridad del libro es indudable, desde la estructura que se propone para abordar las temáticas hasta los subtemas que se van desarrollando en el mismo, ya que está segmentado en 4 capítulos: Deseo, goce, plus-de-gozar; Estructura, fantasma y sexualidad; Incursiones literarias y cinematográficas y La cultura y el persistente malestar; así, va presentando el panorama de la lectura.
    La compleja jerga lacaniana nos ha llevado a una diversidad de malentendidos, de dudas, de replanteamientos; pero también nos ha orillado a un ejercicio crítico de la lectura del psicoanálisis. El retorno de Lacan no fue en vano, es preciso retornar y descubrir aquello que está en sombras. Gerber da pistas, retorna a Freud y nos acerca al entendimiento o a la elaboración de los conceptos clave de la enseñanza de Lacan. Partiendo de El sueño de Freud logra un recorrido que permite ubicar los cruces inevitables con el Otro, el goce y el deseo, además de ubicar las diferencias que se esbozaron entre Freud y Lacan para dar cuenta de los efectos del lenguaje sobre el sujeto. Cierto es que a los largos pasos que da el tiempo y con ello la diversidad de avances, se nos cuestiona la vigencia de los hechos; el psicoanálisis no escapa a ello, y a tal motivo, el argumento sólido del uso de la noción de “estructura” es un apartado obligadísimo a leer/trabajar por parte de aquellos que estamos inmersos en la clínica. Es necesario reiterar que las puntualizaciones que se van realizando a lo largo de la lectura, nos permiten pensar el uso, o vigencia de las estructuras subjetivas en la época y su entendimiento para acercarnos al sinthome, aquel que Lacan presentará en su seminario de 1975-1976.
    Más adelante veremos a Sabato, Visconti, Wells, Buñuel, Hitchcock, Scola, Szabó, Kieslowski, Wong Kar Wai y Cronenberg; literato y cineastas son el soporte para las reflexiones en torno al amor, al deseo, al cuerpo, a La Mujer, entre otros más que nos hacen revisitar los filmes o novela para decir: ¿cómo es que no me percaté esto? Es literalmente una Incursión, Buñuel y Bergman, son los cineastas que presentan una mayor frecuencia en dicho capítulo, pero las transiciones que hay entre filmes y directores en un momento parecieran distantes, sin embargo, los puntos de encuentro son esa imagen o fragmento que nos revela algo que pasamos por alto, pero que siempre estuvo ahí, pero que por alguna curiosa o extraña razón no dimos cuenta.
    La cultura y el persistente malestar, nos presenta la diferencia que se da entre psicoanálisis y ciencia como saberes instaurados en la época freudiana donde Gerber delimita los alcances y la operación desde la que cada uno ejerce su discurso, logrando con ello clarificar las intenciones del psicoanálisis ante o como un posible discurso científico. Continuando con el recorrido, también nos acercará desde la mirada psicoanalítica a leer la historia como una condición de los hechos ahistóricos, es decir; ahí donde no hay posibilidad de simbolizar, es donde la historia hará su aparición, dado que lo relevante para nuestra práctica es la interpretación de los hechos a partir del sujeto, aquel que en su fracaso por repetir la historia también abre la posibilidad de reinventar la memoria, y con ello, la historia que lo constituyó a partir del Otro. 
   Sin duda, uno de los reclamos que ha padecido el psicoanálisis, principalmente la enseñanza de Lacan, es lo enmarañado del discurso para presentar las problemáticas que permean al sujeto y a la esfera social. Gerber facilita el recorrido por las lecturas, acontecimientos del psicoanálisis y las eventualidades que en muchas ocasiones parecieran sin relevancia, lo cual no indica que sea una lectura pasajera, al contrario, es un libro hecho de letras, de palabras, que al igual en el lenguaje y sus enigmas hay un decir aún no dicho.
    En Deseo, historia y cultura se abre un campo para la relectura de Freud, de Lacan, pero también funciona como nexo para reinterpretar los hechos del campo social en el que somos partícipes, además de invitarnos a leer de otra forma la contemporaneidad.

*Puedes descargar la reseña en formato PDF dando click qui









No hay comentarios:

Publicar un comentario